Por: Ana Jiménez
Cada 19 de noviembre se conmemora el día internacional del hombre desde el año 1999, el cuál, fue proclamado por el Comité Internacional del Hombre en Trinidad y Tobago. Este día no se trata de una celebración, y no porque no sea importante festejar al género masculino en nuestra sociedad mexicana, sino porque su significado es aún más profundo, ya que se trata de un recordatorio importante y una invitación para reflexionar sobre las problemáticas que integra a nivel de salud, el ser hombre en las diversas sociedades. Y con ser hombre nos referimos a la masculinidad tradicional que se relaciona y tiene un impacto en la salud de los hombres.
Salud Masculina
Hablar de la salud masculina, integra cuestionar los roles del hombre en la sociedad y como estos se relacionan con el impacto en su propia salud, la interacción con su entorno, vínculos cercanos y la sociedad en general. En México las siguientes frases han sido empleadas para determinar comportamientos “masculinos” y es importante enfatizar que no se trata de un juicio, ni señalamiento a estos. Sino una manera de observar su relación con los problemas de salud que enfrentan.
¡Aguante como los machos!
¡No llores!
¡Los hombres somos de acero!
Centrar la masculinidad en el modelo tradicional del hombre, resalta y fomenta conductas asociadas a la virilidad y la reafirmación de esta, como hombres, y entre hombres. En relación a la salud son los hombres quienes acuden menos al médico y por consecuencia y sumado a otros factores, es la población masculina quien presenta una menor esperanza de vida. Por lo que las complicaciones de salud que enfrentan son consecuencia de soportar dolor, y no tomar de manera seria el cuidado de su salud, porque un hombre no debe mostrar dolor, vulnerabilidad, ni preocupación pues debe ser “firme, fuerte e inquebrantable”.
Transitar la vida y por tanto, la salud entre hombres y mujeres es distinta y de igual forma la manera de enfermar.
Los principales padecimientos en hombres en México son: la diabetes mellitus como la primer causa de enfermedad, seguida de cardiopatías isquémicas, cáncer de próstata, testículos, pene, enfermedades vasculares, cirrosis, y padecimientos asociados con la ingesta de alcohol; como enfermedades del hígado, sin pasar por alto los temas relacionados a la salud mental.
Generalmente la detección de las enfermedades en hombres tardan más en ser identificadas primero por los propios hombres, detectadas, y atendidas de manera oportuna por el personal médico correspondiente porque falta trabajar y promover una cultura preventiva de la salud masculina, sin estigmas y con un enfoque integral.
Diversas de las complicaciones severas en temas de salud masculina, son tratables y sobre todo, prevenibles. Por ello las recomendaciones a los hombres integran: el cuidado de su alimentación, activación física, chequeos médicos regulares, análisis de rutina, atención de la salud mental, descanso adecuado, manejo de estrés, moderar o anular el consumo de alcohol y el tratamiento de ser necesario de consumo de sustancias.
Hombre, tu salud y vida son importantes. Sentir dolor y vivir con malestar no es cosa de hombres. Prioriza tu salud, atiendete, chécate.
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