Por: Sandra Martinez
En el municipio de Zumpango, Estado de México, hay una mujer que no solo mueve cuerpos al ritmo del fitness, sino que también inspira corazones con su dedicación, energía y pasión: Lucía Soto Flores, conocida cariñosamente como Lucy Pingo.
Con ocho años de experiencia como instructora fitness, esta madre orgullosa de tres hijos – Brandon, Brayan y Brenda Avilés Soto – ha hecho de su profesión una forma de vida. Su academia, “LATÍN JUSS”, se ha convertido en un refugio para quienes buscan transformar su cuerpo y mente a través de disciplinas como Combat, Baile Fitness, Zumba, Funcional, Chair Funcional, Sexy Chair y Entrenamiento Personalizado.
Su misión es clara: impulsar a sus alumnos a alcanzar sus metas mediante constancia, disciplina y una buena alimentación. Los resultados hablan por sí mismos; LATÍN JUSS no es solo un espacio de ejercicio, sino una comunidad de crecimiento personal.
Pero Lucy no se detiene ahí. Los fines de semana, cambia las pesas por un corazón lleno de empatía al desempeñarse como cuidadora geriátrica.
Lucy Pingo se describe como trabajadora, honesta, leal, amorosa, pero también muy directa. Sus clases, impartidas de lunes a viernes a las 9:00 am y 6:00 pm, son una combinación perfecta de disciplina y diversión.
Para Lucy, ser instructora no es solo una profesión, es su pasión. Su energía contagiosa, carisma y enfoque en el bienestar la han posicionado como una figura clave en el mundo fitness de Zumpango. Si estás buscando motivación, LATÍN JUSS y Lucy Pingo están listos para darte la bienvenida con los brazos abiertos y un entrenamiento que te hará sentir más fuerte y feliz.
¿Te animas a ser parte del cambio? En LATÍN JUSS, el bienestar comienza con el primer paso.

