Leonardo Juárez R.
Después de advertir que el director de la Comisión Federal de Electricidad es objeto de una campaña de desprestigio, el presidente Andrés Manuel López Obrador aclaró que no tiene informes de que en Estados Unidos le investiguen por el caso del asesinato del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena.
López Obrador como en otras ocasiones arremetió contra los medios de comunicación a los que pidió que si se tienen pruebas de esa supuesta investigación se presenten ante la ciudadanía, “por la campaña de descrédito contra Bartlett nuestros adversarios también retoman la información de 1988, referente a la caída del sistema electoral”.
Insistió, “no tengo información sobre eso, e independientemente de la responsabilidad o no que pueda tener el licenciado Manuel Bartlett Díaz, lo que es evidente, público y notorio, es que se trata de campañas de descrédito de la revista Proceso y de la mayoría de los medios”.
Apuntó, “porque Bartlet ahora es el encargado de la industria eléctrica y está enfrentando a grupos de intereses creados, y cada vez que pueden se le lanzan, si no es por esto es por la acusación de que en 1988 se cayó el sistema, sí es verdad que presenten pruebas. Si las hay que se proceda, y no linchamiento en los medios. No es un problema de odios o ningún asunto personal, sino es la defensa de un proyecto frente a los embates del conservadurismo que se está agrupando y como siempre, actúan como reaccionarios”.
Indicó, si en Estados Unidos están investigando a Bartlett, “yo no tengo información y tampoco la Fiscalía (General de la República), los ataques no van precisamente contra Manuel Bartlett, sino para afectar a nuestro proyecto de gobierno y por ese motivo se explica la campaña de desinformación, de ataques por el proceso de transformación; entonces si hay pruebas que se proceda”.
Aseveró, “si se tienen pruebas -no el expediente que tiene la DEA, la CIA o el FBI- de que el “gobierno de Estados Unidos está solicitando a México que se investigue el licenciado Bartlett, pues que presenten las pruebas. En nuestra administración no se va a proteger a nadie, no habrá impunidad, pero también que se vaya aclarando de que son a veces cuestionamientos que no tienen sustento, que no tienen fundamento, porque es mucha carga política”.
