Festival Internacional de Cine de Rotterdam
El cinefotógrafo Diego García, egresado del Centro de Capacitación Cinematográfica, se convirtió en el primer ganador del Premio Robby Müller, otorgado por el Festival internacional de Cine de Rotterdam(International Film Festival Rotterdam- IFFR) el 27 de enero pasado. El jurado del reconocimiento estuvo integrado por el editor Jay Rabinowitz, los cinefotógrafos Josje van Erkel y Richard van Oosterhout, la historiadora del arte Andrea Müller-Schirmer los programadores de IFFR Gerwin Tamsma y Evgeny Gusyatinskiy.
Durante una ceremonia dentro del festival que se desarrolló del 22 de enero al 2 de febrero, el cinefotógrafo y miembro fundador de la Sociedad Holandesa de Cinefotógrafos (NSC), Theo Bierkens, aseguró que el premio no se trata del resultado de una competencia, sino de un reconocimiento que debe estar guiado por dos vertientes, la primera el honrar y mantener el legado del hombre responsable de la fotografía de películas como Breaking the waves o Paris, Texas; y en segundo lugar el impulso a la experimentación en el campo de la cinefotografía.
En seguida, Andrea Müller-Schirmer, afirmó que el significado del premio era celebrar el legado de su difunto esposo así como inspirar a nuevas generaciones. Indicó, que una de las características que marca el recién creado premio y que es una que Diego posee, es el saber tomar las decisiones correctas en una película, las cuales deben estar guiadas por la pasión y por una honestidad hacia sí mismo.
Andrea Müller-Schirmer destacó la capacidad singular de Diego García para traducir ideas y sentimientos en imágenes, convirtiéndose en un medio invisible hacia una misteriosa realidad y empujando el cine hacia nuevas direcciones. Señaló que el lenguaje visual del joven cinefotógrafo es siempre convincente, construido sin esfuerzo y nunca intrusivo, con un claro y reconocible estilo que apoya completamente a la narrativa en donde el espectador se siente libre y la cámara se convierte en más que un dispositivo sino en un ojo curioso de mente abierta. Terminó afirmando que de manera conclusiva, el jurado sintió que había una línea directa entre los preceptos de Robby Müller y el trabajo de Diego García.
Andrea Müller-Schirmer hizo entrega del premio, una impresión de una de las exclusivas polaroids tomadas por su esposo y seleccionada por ella misma.
Finalmente, un conmovido Diego García agradeció el premio y dijo estar emocionado por la conexión que dicho reconocimiento implicaba hacia la figura de Robby Müller, quien fue siempre una de sus grandes inspiraciones a través de la mirada mágica y especial impresa en las obras que fotografió.