Norma Anyelin Ortiz;
Entrenadora Personal Fitness
Muchas veces cuando vemos cuerpos esculpidos y muy estéticos, de inmediato pensamos que se debe a la práctica de levantamiento de pesas y un montón de chochos que el atleta consume, eso se escucha con frecuencia sobre todo gente que desconoce este deporte, suele expresarse así, otros piensan que es culpa meramente de la genética, por ello es que hoy creo yo, es importante hablar sobre el dominio que tiene la genética a la hora de desempeñar cualquier disciplina deportiva, porque claro no solo en el fisicoculturismo y fitness influye, sino en la capacidad y talento de diversos deportes.
Haber el deportista nace? O se hace?, como muchas veces se dice del don o talento deportivo, creo yo que todos nacemos con un talento nato, pero cuánto esfuerzo hay en cada individuo por trabajarlo, en este caso el deportista cuánto sacrificio hace en su proceso de preparación competitiva y carrera deportiva. La genética es esa parte de nuestro ser que no podemos controlar y que hace que se marquen las diferencias entre cada atleta, es absurdo negar que la genética es crucial para llegar a destacar en los deportes y otra cosa muy diferente es que el esfuerzo, la dedicación y la perseverancia sean también factores con un gran peso en la ecuación… Bien, la práctica deportiva está muy determinada por los genes, pero ¿y las aptitudes deportivas? qué pasa con ellas, cuántas veces nos ha pasado que un compañero (a) de entrenamiento aumenta su volumen muscular más rápido que nosotros haciendo el mismo ejercicio e incluso menos.
Esto nos llega a frustrar bastante, ya que muchas veces, relacionamos la cantidad de ejercicio y el peso que levantamos con la hipertrofia, (desarrollo muscular) cuando realmente lo que determina nuestro volumen muscular es la genética y el tipo de fibras musculares que tenemos. Cómo nos explicamos que cuando varios atletas participantes de una misma categoría o modalidad presentan similitudes en el físico pero no todas presentan la misma reacción y misma estética.
Aquí el punto clave es saber identificar que el cuerpo humano y la predisposición genética se divide en fenotipo y el genotipo, para ello explicaré en qué consiste cada uno, y es muy sencillo diferenciarlos, el fenotipo solo hace referencia las características observables de la capacidad del individuo y estas características están predeterminadas por el genotipo, siendo el genotipo, la información genética presente en los genes, los cuales no se observan a simple vista, en concreto me refiero al ADN, que se transmite de generación en generación. Es decir estos caracteres hereditarios por parte de nuestros padres son los que hacen tener cierta influencia o predisposición hacia la práctica de un deporte u otro, es decir quee algunos genes pueden marcar la diferencia en parámetros relacionados con el rendimiento deportivo, de manera que, acaso todo aquel que quiera convertirse en Campeón tendría que tener cuidado al elegir a sus padres, jajajaja bueno imposible pero lo que se hereda genéticamente no lo es todo, pues podemos afirmar que el entrenamiento es una variable multifactorial donde el hábito y la disciplina perfeccionan las aptitudes físicas y la respuesta depende en cierto modo del entorno, entregarse a tope en el entrenamiento en el gimnasio es importante para adquirir una excelente apariencia física o ganar alguna medalla, pero no todo el mundo responde igual al entrenamiento, ni consigue los mismos resultados ni batir las mismas marcas, puesto que cada individuo no tiene la misma disponibilidad para el sacrificio y la constancia.
La genética por tanto, aporta conocimientos científicos que pueden ayudarnos a optimizar el rendimiento de un deportista de alto nivel, rentabilizar los efectos de la práctica del ejercicio físico y/o llevar a cabo una práctica deportiva segura, creo yo, pues que inclusive hasta la resistencia cardiovascular puede es hereditaria, ya sea heredado del gen de la madre o del padre, “También hay genes que establecen que hay más predisposición de ser obeso, o desarrollar enfermedades, de ser miope, o de sufrir un infarto precoz”, con esta información de predisposición genética se pueden tomar ciertas conductas preventivas. Para alguien con riesgo cardíaco, por nombrar un caso, se le recomendará evitar deportes extremos de alto impacto que pueden terminar en muertes súbitas, como es el caso de algunos futbolistas que inexplicablemente se han muerto en pleno partido.
Estos factores podríamos decir que son lo que no se pueden controlar, en cambio los que a continuación te menciono claro que se pueden controlar y entre ellos figuran; la nutrición, el entrenamiento, el descanso y otras más como: 1. Dietas altas en proteína: La proteína es el macronutriente que tiene más efecto térmico. Eso quiere decir que es el macronutriente en el que nuestro cuerpo invierte más calorías en digerir y por lo tanto nos hace quemar más calorías al final del día. Las dietas altas en proteína queman más calorías que las dietas bajas en proteína. 2. Cantidad de masa muscular: El músculo es un tejido que cuesta muchas calorías de mantener, por lo que una persona cuanta más masa muscular tenga más calorías gastará en reposo por el simple hecho de mantener esa masa muscular. 3. Consumo de estimulantes: Hay muchas sustancias (como la cafeína, la efedrina, el clembuterol, y otro tipo de ayudas ergogénicas…) que hacen aumentar nuestra tasa metabólica solo un pequeño porcentaje. Que quede clarooo que el hecho de que podamos controlar ésto no significa que obligatoriamente debamos utilizarlos, los suplementos no deben convertirse en una necesidad, en ningún caso te debes hacer dependiente de ellos, sino solo incluirlos como un pequeño estímulo. 4. Glándula tiroides: glándula encargada de regular el metabolismo basal. Esto básicamente es genético, pero si es cierto que las hormonas secretadas por la tiroides requieren de cantidades mínimas de yodo para que se puedan sintetizar, por lo que si la dieta es muy pobre en yodo hay riesgo de que el metabolismo baje. Y el resultado final es que prevalezcamos o no a la genética, eso no es excusa para no dar el 100% de lo que tú personalmente eres capaz de dar y ser mucho mejor de lo que creas serlo, pues tal genética siempre tiene que venir acompañada del mismo esfuerzo, dedicación y perseverancia.
El cuerpo genéticamente es más o menos hábil en lograr hacer lo que nosotros queremos que haga, por lo que habrá cuerpos que serán increíblemente eficientes cuando están en estado anabólico (fabricación de tejidos ) y la gran mayoría de las calorías extras que consuman las usará el mismo cuerpo para fabricar tejido muscular y apenas guardará calorías en forma de tejido adiposo, del mismo modo este tipo de personas, serán increíblemente eficientes en estado catabólico y en obtener la energía necesaria cuando están en déficit calórico de las reservas de grasa corporal, preservando el músculo en un alto grado. Y la desventaja de muchos y yo me incluyo en este grupo, que por el contrario tendemos a tener una partición de nutrientes menos óptima y cuando se encuentra en exceso calórico no construye todo el músculo posible y almacena más grasa de la cuenta y para colmo cuando está en déficit no mantenemos tanto músculo, ya que lo usamos como fuente energética y nos cuesta más quemar las reservas de grasa corporal. Y buenooo lo perfecto sería que todo nuestro potencial anabólico se concentrara en crear músculo y nuestro potencial catabólico se concentrara en perder grasa para obtener energía. Pero no en todos los cuerpos se da, y es aquí cuando se nota la diferencia de los físicos que genéticamente lo consiguen en alto grado y a otros nos cuesta más. Por lo tanto digo yo que se puede ser un gran deportista por tener una capacidad de sacrificio admirable, disposición y entrega, aún sin unas condiciones demasiado óptimas genéticamente, pero no por ello no será posible poder desarrollarlas.
Como siempre espero aportarte un poco de todo lo que hay detrás de un talento deportivo y que muchas veces no imaginamos.
Todos nacemos con un talento, El problema es descubrirlo y trabajarlo…
Anyelin Muscle