Leonardo Juárez R.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en su gobierno no se espía a ningún periodista o columnista y tampoco su intención es amedrentar. “eso es completamente falso, para que vamos a espiar si son predecibles en los que van hacer o escribir”.
Reiteró que su administración cuenta con principios y “no se va a espiar a nadie. Ya sabemos que están en contra nuestra. No leo ese tipo de columnas desde hace dos años, son lugares comunes y pertenecen al hampa del periodismo. El origen de este tema es el abogado de Televisa, Javier Tejado, que también es columnista”.
Subrayó, “para ellos el presidente es muy malo, comunista, populista, persigue a periodistas, limita la libertad de expresión, censura y no da dinero… Los tiempos del espionaje político a comunicadores se terminó, y nunca más se hará eso.
Al tocar el tema de las acusaciones del gobernador de Michoacán Silvano Aureoles Conejo de narcopolítica de Morena, refirió “lo retó a que presente pruebas de su declaración respecto a que el crimen organizado favoreció a Morena en las pasadas elecciones del 6 de junio. Si el gobernador tiene pruebas de una intromisión del crimen organizado en Michoacán que las presente. Lo más importante es que se presenten pruebas porque si no, son noticias sensacionalistas, amarillismo y eso es bastante”.
El mandatario michoacano declaró el pasado miércoles que el crimen organizado en la entidad favoreció a Morena en las pasadas elecciones, donde ganó Alfredo Ramírez Bedolla candidato del partido oficial. “Si se confirma lo que hoy está sucediendo, el crimen organizado va a poner otra vez al gobernador. Alfredo Ramírez Bedolla representará al crimen organizado en Michoacán, ellos lo pusieron. De los 14 municipios, controlados por el crimen organizado, Morena gana en 13, México se encamina a ser un ‘narcoestado'”.
Manifestó, “Morena es un narco partido y es una verdadera amenaza para el país. Estoy absolutamente convencido que la elección de Michoacán debe anularse, los michoacanos no queremos que regrese el ‘narcogobierno’, un gobierno impuesto por el narco”.
En ese sentido López Obrador sostuvo “hasta el momento no hay pruebas de ello y no nos prestaremos a este tipo de comentarios o informaciones sin sustento”.
